España y Portugal fueron los paises que iniciaron la expansión Europea en América. Colón el 12 de Octubre de 1492, en un azaroso viaje por el Océano Atlántico, llegó a la isla de El Salvador, y luego de otros tres viajes llegó hasta América Central, motivando a otros expedicionarios a descubrir nuevas tierras y tesoros, quienes recibieron noticias de la existencia del Imperio de los Incas.

A principios de 1532, los españoles al mando de Francisco Pizarro, desembarcaron en las playas de Tumbes, y después de cruentas batallas iniciaban la incorporación del Tahuantinsuyo de los Incas a la dominación española.

El 15 de Noviembre de 1532, Francisco Pizarro establecido en Cajamarca, envía a Hernando de Soto para que invitara a Atahualpa, que se encontraba en los baños termales cerca de la ciudad, quien respondió que lo visitaría el día siguiente. El 16 de Noviembre Atahualpa ingresaba a la ciudad de Cajamarca siendo recibido por el fray Vicente Valverde, con quien dialogó ayudado por el interprete Felipillo, a una señal convenida los españoles que se encontraban ocultos en los edificios atacaron a las huestes de Atahualpa, quien fue hecho prisionero por Francisco Pizarro.

Ante esta situación Atahualpa ofreció para recobrar su libertad, llenarle con objetos de oro la habitación en donde se encontraba prisionero hasta la altura de su mano, pese a que los españoles recibieron una buena parte del rescate ofrecido, pero presionados por el temor de una sublevación de las fuerzas de Atahualpa, decidieron darle muerte.

En una farsa de juicio fue condenado a la pena de muerte la cual se llevó a cabo el 26 de Julio de 1533, muriendo por estrangulamiento (garrote).

Con este asesinato político empezaba la caía del Imperio de los Incas, la caída de una cultura que alcanzó un desarrollo que sorprendió a sus invasores.